En una entrevista en
Good morning América
, de la cadena ABC, el exvocalista de Black Sabbath ha asegurado que
no quiere seguir engañando a sus fans,
a los que no dio explicaciones el año pasado cuando anuló la gira que le iba a llevar por todo el mundo.
“Son mi oxígeno, ya sabes”, dijo Osbourne sentado junto a su esposa, Sharon, junto a la que hace unos años protagonizó un
docu-reality
de cierto éxito por lo estrambótico de sus vidas. “Me siento mejor. Acepté el hecho de que tengo párkinson. Y
sólo espero que aguanten y estén ahí para mí porque los necesito”
, agregó.
El diagnóstico
lo conoció en febrero de 2019
, después de caerse en casa y someterse a una cirugía de cuello. Después ha sufrido una neumonía, complicaciones por gripe e infecciones en una mano.
El Parkinson es un
desorden neurodegenerativo progresivo
que causa temblores y movimientos lentos. No tiene cura, pero los medicamentos pueden aliviar los síntomas.
Osbourne se está medicando para controlar esta enfermedad, y también para
su estado de ánimo.
Sharon Osbourne añadió que el tipo de párkinson de su marido “
no es de ninguna manera una sentencia de muerte
, pero afecta ciertos nervios en el cuerpo. Es como si tuvieras un buen día, y luego un día realmente malo”.
Ozzy Osbourne pretende volver a los escenarios con
heavy metal
. La gira en solitario que suspendió el año pasado por problemas de salud,
No More Tours 2,
está programada para comenzar en Estados Unidos a fines de mayo, según la página web del cantante.
“Estoy mucho mejor ahora que en febrero pasado”, dijo. “Estaba en estado de
shock
