Según la información de ‘Cinco Días’, el bloqueo se produce ante una serie de clientes sancionados por terrorismo en Estados Unidos por sus vínculos con el régimen iraní.
En el documento remitido a la SEC, Santander expone que “el grupo ha tomado medidas significativas para retirarse del mercado iraní, como cerrar su oficina de representación en Irán y cesar todas las actividades bancarias allí, incluidas las relaciones corresponsales, la captación de depósitos de entidades iraníes y la emisión de cartas de crédito de exportación, excepto por las transacciones legado descritas anteriormente”.
En el caso concreto de Reino Unido, además, la entidad destaca que “Santander UK mantiene bloqueadas siete cuentas de cinco clientes que actualmente están sujetos al programa de sanciones Specially Designated Global Terrorist (SDGT) de Estados Unidos. Los ingresos y beneficios generados por Santander UK en estas cuentas durante el año finalizado el 31 de diciembre de 2023 eran insignificantes en relación con los beneficios de Banco Santander SA”.
En Bélgica, “las cuentas han estado bloqueadas desde 2008. Ningún ingreso o beneficio fue generado por la sucursal belga en estas cuentas en el año finalizado el 31 de diciembre de 2023”.
No obstante, hay que destacar que esto tiene lugar al margen de las informaciones de hace unas semanas, en las que ‘Financial Times’ aseguraba que Irán habría usado cuentas en Santander y Lloyds para mover dinero de forma encubierta y así evadir sanciones.
En concreto, se decía que proporcionaron cuentas a empresas pantalla británicas propiedad secreta de una empresa petroquímica iraní sancionada con sede cerca del Palacio de Buckingham. Se trata de Petrochemical Commercial Company (PCC).