La firma de la manzana ha sido una de las más rezagadas a la hora de llevar la IA a sus dispositivos, y los analistas aseguran que esta estrategia puede traducirse en ganancias en bolsa, mientras otras tecnológicas sufren por los elevados gastos que están realizando en el desarrollo de esta herramienta.
El gigante tecnológico de Cupertino presentó a mediados del año pasado su gran apuesta de IA, Apple Intelligence, aunque esta no llegó a los dispositivos de la compañía hasta finales de octubre, con la promesa de seguir desarrollando sus capacidades en los próximos meses.
David Morrison, analista senior de mercado de FCA, recuerda que Apple “ha caído un 15% desde su máximo histórico de Navidad y está probando el soporte en torno a los 220 dólares”.
“Dada la liquidación de este año, los inversores pueden decidir quedarse de brazos cruzados por ahora, al menos hasta que puedan digerir las ganancias de Apple que se publicarán después del cierre del jueves”, asegura.
Las cuentas que la compañía presentará este jueves pueden ser definitivas para el sector, y llegan en un momento de preocupación para la tecnológica por los primeros datos de ventas que llegan para el último iPhone.
La semana pasada, los analistas de Bank of America recortaron su precio objetivo hasta los 253 dólares por acción desde los 256 dólares por título previos en medio de unas perspectivas más débiles para el iPhone. Con todo, creen que Apple mostrará un “informe sólido” el jueves, por lo que reiteran su recomendación de ‘comprar’ el valor.
“Esperamos un informe sólido impulsado por la demanda inicial del iPhone 16. Sin embargo, en parte debido a la débil situación macroeconómica y en parte debido al lanzamiento escalonado de las funciones de Apple Intelligence, que creemos que aún no ha logrado una adopción generalizada, bajamos nuestra estimación de unidades de iPhone para el segundo trimestre de su año fiscal 2025 (trimestre de marzo) a 49 millones (desde 56 millones)”, detallan.