El fútbol femenino se está revalorizando. Las futbolistas suben su caché con fichajes que rondan y hasta superan el millón de euros, algo impensable hace solo algunos meses. Sonado ha sido el reciente traspaso de la internacional estadounidense Naomi Girma al Chelsea de Sonia Bompastor, que pasó del millón por primer vez en la historia del fútbol femenino.