Siendo una obviedad que España ha bajado el pistón desde que en el verano de 2023 se proclamó campeona del mundo después de ganar en la final a Inglaterra en Sidney (1-0), no hay que olvidar que ese título sigue vigente. Porque ahora parece que pese a que la selección de Montse Tomé sufrió un batacazo en los Juegos Olímpicos y el otro día cayó por la mínima ante el combinado inglés en la Nations League, España ya no es nadie, cuando sigue siendo también la vigente tenedora de este título europeo.