El empresario, que iba acompañado de su hijo y de su mujer, resbaló en uno de los senderos y cayó de una gran altura Isak Andic, propietario de Mango, fallecía al caer al vacío desde una altura de unos 150 metros en unas cuevas de Barcelona Así es la ruta donde murió el fundador de Mango, Isak Andic: sin barandillas y con un suelo resbaladizo por las lluvias