La selección de Japón logró su clasificación para el Mundial tras vencer a Bahréin en un partido clave, con el futbolista de la Real Sociedad Takefusa Kubo como gran protagonista. El jugador del conjunto txuri urdin fue determinante en la victoria, aportando un gol y una asistencia en un duelo en el que los nipones demostraron su fortaleza ante un rival en alza, reciente campeón de la Copa del Golfo.