El repunte es mayor en las ‘altcoins’. Por ejemplo, el ethereum (ETH) se ha disparado más de un 7% en las últimas 24 horas, muy influenciado por la creencia de que la Administración Trump favorecerá a los criptoactivos y a las finanzas descentralizadas (DeFi). Cabe recordar que Trump es el rostro visible de World Liberty Financial, una especie de plataforma bancaria basada en criptomonedas, en la que también participan sus hijos.
Otros tokens como solana (SOL), Binance coin (BNB), XRP o cardano (ADA) han subido con ganas, hasta más de un 3%. En el lado contrario, dogecoin (DOGE) cotiza con pérdidas destacadas tras dispararse tras conocerse los primeros datos electorales en Estados Unidos.
Como les venimos contando, la victoria de Donald Trump ha dado un vuelco al mercado de las criptomonedas. Las expectativas de mayor –y, posiblemente, más laxa–regulación, así como otras promesas realizadas por el presidente electo, como la creación de una reserva estratégica de BTC o la destitución del presidente de la Comisión de Mercado y Valores (SEC, por sus siglas en inglés), han disparado el optimismo en el mercado. De hecho, analistas como los de QCP Capital prevén que el impulso alcista “se mantenga fuerte a medida que nos acercamos a 2025”.
“Es difícil imaginar un resultado electoral más favorable para la industria, y es probable que las expectativas de mejoras regulatorias clave aumenten en los próximos meses y trimestres. Esta claridad podría abrir espacio para productos adicionales de ETF de criptoactivos, cubriendo los principales activos y potencialmente también un índice cripto más amplio, y dar más confianza a los empresarios e inversores para lanzamientos de tokens en EEUU”, señala David Lawant, director de investigación de la plataforma de servicios financieros FalconX.
Asimismo, otros analistas señalan que se está produciendo una rotación de capital desde el oro hacia el bitcoin: frente a la subida del criptoactivo, el metal dorado ha perdido cerca de 100 dólares desde la victoria de Trump. Según Noelle Acheson, autora de ‘Crypto Is Macro Now’, la subida experimentada por la criptomoneda reina en las últimas horas ha confirmado el fin de una tendencia bajista que se había extendido durante ellos últimos ocho meses. “A nivel global, los inversores se centrarán cada vez más en protegerse contra la devaluación de las monedas y en aprovechar el efecto del mercado de Trump, ambos factores favorables para BTC”, apunta esta estratega.
A corto plazo, los inversores han estado pendientes de la decisión de política monetaria que dará a conocer este jueves la Reserva Federal (Fed). Tal y como estaba descontado por el mercado, ha llevado a cabo una bajada de 25 puntos básicos (pb) de los tipos de interés, lo que tradicionalmente ha sido alcista para los criptoactivos, ya que la devaluación del dólar impulsa el crecimiento en sectores con más riesgo. Asimismo, los datos de la herramienta FedWatch de CME muestran que el consenso se inclina por otra reducción de 25 pb en el cónclave de diciembre, el último del año.
Pero no todo es positivo. En los últimos días el consenso ha vuelto a reducir su previsión de recortes para 2025, que ahora se sitúa en 75 pb para todo el año frente a los 100 pb esperados antes de los comicios presidenciales en EEUU. A comienzos de octubre, el mercado esperaba siete bajadas de 25 pb en 2025 para un total de 175 pb.
Paralelamente, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense han subido con mucha fuerza en las últimas jornadas ante la expectativa de un mayor déficit e inflación en la primera economía del mundo. Sin embargo, los rendimientos a corto plazo también podrían verse sometidos a cierta presión, si se tiene en cuenta la perspectiva de menos recortes de tipos por parte de la Reserva Federal, que podría ver descarrilar su plan ante un nuevo repunte de la inflación.
En este sentido, Min Jung, analista de investigación en Presto Research, señala que será clave la postura de Jerome Powell, presidente de la Fed, para obtener más información sobre la hoja de ruta y la visión del organismo. Esto es especialmente importante ya que este mes no se actualizan las proyecciones oficiales del organismo.