Los años van pasando y el fútbol va evolucionando, pero la polémica y Mourinho siguen yendo de la mano. En el empate de la Roma con la Atalanta (1-1) el técnico portugués fue expulsado en el tiempo de descuento. Una roja que llegó al final de todo, pero que se fue cociendo a lo largo de los 90 minutos. En la primera parte ya vio la amarilla, pero fue en los últimos minutos cuando recibió la expulsión que le impedirá estar en el banquillo contra el Milan.