La incertidumbre acerca de cómo las decisiones de política económica pueden condicionar la evolución de las economías es tal que las principales instituciones de predicción presentan no una proyección única, sino que han optado por construir un escenario base, al que le dan la mayor probabilidad de cumplimiento, pero al tiempo construyen otro más adverso, que hasta ahora apenas tenía probabilidades de ser el real, pero cuyas posibilidades de acierto aumentan a medida que no se despejan las dudas. Leer