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Durante 2023, la compañía ha acelerado sus inversiones hasta alcanzar la cifra récord de 11.382 millones de euros, lo que supone un incremento del 6%. En España ha invertido más de 2.300 millones de euros. En los últimos tres años, el grupo ha destinado más de 33.500 millones en todas las geografías, de los cuales 7.600 millones fueron en España.
El beneficio bruto de explotación (EBITDA) crece un 9,0%, hasta 14.417 millones, debido a la recuperación de la producción y a la eficiencia operativa, que incluye 117 millones de gasto en el cuarto trimestre para eficiencias recurrentes en años venideros, ha explicado la compañía.
El plan de rotación de activos ha sido completado con el cierre de la transacción en México (febrero 2024) y la entrada esperada de caja en los siguientes días (alrededor de 6.000 millones de dólares), además de las alianzas internacionales con Norges Bank, Masdar y GIC.
“En un año de incertidumbres macroeconómicas, una vez más hemos mantenido nuestra histórica trayectoria de cumplimiento de objetivos, gracias a un modelo de negocio integrado y a nuestra estrategia centrada en inversiones y crecimiento en mercados estables. Después de un año de inversiones récord, hemos afianzado nuestra solidez financiera y continuaremos invirtiendo significativamente en la transición energética en 2024. Los nuevos marcos de inversión en redes y nuestros proyectos eólicos marinos en construcción nos ayudarán a conseguir un crecimiento sólido y rentable para el año”, ha declarado Ignacio Galán, presidente de Iberdrola.
Iberdrola ha aumentado su flujo de caja operativo un 8%, hasta los 11.096 millones de euros. La compañía ha dicho que ha continuado reforzando su balance con más de 14.700 millones de euros de nueva financiación en condiciones competitivas de mercado. De esta cuantía, 13.300 millones cumplen con criterios ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza).
Considerando el cierre de la citada operación de México, la deuda neta baja hasta situarse en una horquilla entre los 42.000 y los 42.500 millones de euros y el ratio de generación de caja sobre la deuda neta mejora hasta el 25,8%.
La liquidez del grupo se ha situado en los 20.900 millones de euros, lo que le permitiría cubrir 27 meses de necesidades financieras sin recurrir al mercado y la vida media de su deuda roza los 6 años.
DIVIDENDO Y PERSPECTIVAS 2024
Iberdrola se propone un dividendo complementario de 0,348 euros por acción, pendiente de ser aprobado en la Junta General de Accionistas, que junto con el dividendo a cuenta de 0,202 euros por acción, representa un dividendo total de 0,550 euros por acción con cargo a los resultados de 2023. Esto representa un crecimiento del 10,8%, en línea con el crecimiento de los resultados, desde los 0,496 euros por acción en 2022.
De cara a 2024, la compañía afirma que quiere seguir liderando la transición energética y se ha comprometido a invertir 12.000 millones de euros en 2024, lo que le permitirá incrementar su capacidad instalada renovable terrestre en 2.000 MW, a la que se unirá la contribución de los nuevos proyectos eólicos marinos actualmente en construcción. Además, la empresa seguirá invirtiendo en redes, contando con nuevos marcos regulatorios en los Estados Unidos, el Reino Unido y Brasil, y tiene ya cerrada la venta del 100% de su energía para este ejercicio.
Con todo ello, prevé un crecimiento del beneficio neto del 5%-7% -excluyendo plusvalías por rotación de activos- y se estima que el dividendo aumente en línea con los resultados.
Iberdrola aportará más detalles de sus perspectivas para los próximos años el próximo 21 de marzo en Londres, donde celebrará su ‘Capital Markets Day’.