David Kostin, estratega jefe del banco neoyorquino, explica en un informe que “el aumento de las estimaciones de beneficios” de las cotizadas es el principal “motor de la revisión”. “Esperamos que el fuerte crecimiento del PIB mundial y un dólar ligeramente más débil apoyen los beneficios por acción, mientras que la bajada de los tipos y de los precios del petróleo supondrán un ligero lastre”, ha agregado Kostin.
En este sentido, el banco de inversión estadounidense ha pronosticado que los valores tecnológicos y de gran capitalización, especialmente los ‘7 Magníficos’, sean los grandes impulsores de los beneficios del índice en 2024. De hecho, Kostin cree que el crecimiento de la inteligencia artificial (IA) y la fortaleza del consumo, así como las perspectivas económicas y de bajadas de tipos de interés en EEUU, impulsarán tanto los ingresos como los márgenes de estas compañías. Cabe señalar que, en las últimas semanas el tecnológico Nasdaq también consiguió marcar nuevos máximos históricos.
En concreto, los estrategas de la firma mejoraron sus previsiones de beneficios por acción para el año hasta un rango de entre 241 y 256 dólares en 2025, desde los 237 y 250 dólares anteriores. La nueva estimación se sitúa por encima de la previsión mediana de los estrategas de 235 dólares.
Para el resto del índice, Kostin cree que los márgenes operativos también deberían mejorar, pero en un grado “mucho menor”. Según este experto, esto se debería a que los costes de los insumos, como el crecimiento de los salarios, siguen moderándose, lo que se suma a un “sólido” crecimiento de las ventas y a una desinflación de precios todavía “modesta”. Asimismo, Goldman Sachs prevé que los múltiplos de valoración para el S&P 500 e índices comparables se mantengan cerca de los niveles actuales, en 20 y 16 veces los beneficios, respectivamente.
El objetivo de Goldman de 5.200 para el S&P 500 en 2024 es ahora uno de los más altos de Wall Street junto al de, entre otros, Oppenheimer Asset Manager o Fundstrat Global Advisors. La media del consenso se sitúa justo por debajo de los 5.000 enteros, en los 4.950 puntos.
Otros analistas como Savita Subramanian, de Bank of America, también se han mostrado optimistas con el S&P 500 y creen que el objetivo a corto plazo es “alcista”. “Nuestro objetivo de 5.000 es probablemente demasiado bajo a corto plazo”, ha reconocido en una entrevista concedida a ‘Bloomberg TV’.
Por el contrario, Michael Wilson, director de inversiones de Morgan Stanley, se sigue mostrando bastante bajista para 2024, ya que prevé que el selectivo cierre el año en 4.500 puntos, un 10% por debajo de los actuales niveles. Con todo, Wilson espera que las ganancias del mercado de renta variable estadounidense se extiendan a otros sectores más allá del tecnológico.